Planes de igualdad como herramienta feminista en los centros de trabajo
Madrid, 10 mar. 2022. AmecoPress.- El pasado lunes acababa el plazo para incorporar un plan de igualdad en las empresas con más de 50 trabajadores. La decisión busca establecer unas medidas que permitan alcanzar en la empresa la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres y a eliminar la discriminación por razón de sexo.
A partir de este lunes, las empresas con más de 50 trabajadores en plantilla y las últimas en sumarse esta obligatoriedad ascienden a 24.666, de las cuales solo un 16,13% habían registrado el documento en el mes de diciembre. A partir de este martes, la falta de registro de un plan de igualdad constituye una infracción grave sancionable con multas de hasta 7.500 euros, que se puede convertir en multas de hasta 200.000 euros si hay una denuncia por discriminación o en caso de la empresa este obligada por orden de la Inspección de Trabajo.
La entrada en vigor de la nueva normativa ha supuesto multiplicar por cinco las empresas sujetas a la obligación, y desde la secretaría confederal de Mujeres, Igualdad y Condiciones de Trabajo de CCOO están “redoblando esfuerzos para responder con la mayor celeridad estar en las comisiones negociadoras”.
Esta exigencia fue aprobada en 2019 por el gobierno, la obligación en esos momentos se aplicaba en empresas con más de 250 empleados. El plan de igualdad se estableció en empresas a partir de 50 trabajadores, pero se dio de margen tres años y se fue ampliando de manera progresiva. Tal y como se explica desde la secretaría confederal, las empresas deberían estar preparadas, pues “así lo está demandando la sociedad de una manera clara”. También, desde el punto de vista legislativo, estas medidas urgentes estaban previstas ya en el Real Decreto-Ley 6/2019 para garantizar “a igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres en el empleo y la ocupación”.
El plan de igualdad es un conjunto de medidas, adoptadas tras un diagnóstico de situación, con el fin de alcanzar en la empresa la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres y a eliminar la discriminación por razón de sexo. Las medidas están dirigidas a remover los obstáculos que impiden o dificultan la igualdad efectiva de mujeres y hombres en los centros de trabajo, empresas y Administraciones Públicas. Las medidas que se pueden llevar a cabo, después del diagnostico, en las siguientes materias: Proceso de selección y contratación; Clasificación profesional; Formación; Promoción profesional; Condiciones de trabajo, incluida la auditoría salarial entre mujeres y hombres; Ejercicio corresponsable de los derechos de la vida personal, familiar y laboral; Infrarrepresentación femenina; Retribuciones; Prevención del acoso sexual y por razón de sexo.
Los sindicatos coinciden en que esta nueva ley es un avance en el camino de la igualdad laboral que puede suponer una transformación profunda. La secretaría confederal de Mujeres, Igualdad y Condiciones de Trabajo de CCOO definen los planes de igualdad como herramientas del feminismo en los centros de trabajo, que pueden “reducir significativamente las brechas laborales de género que afectan a las mujeres, muy especialmente la brecha salarial”. También, “combatir los suelos pegajosos y los techos de cristal”, es decir, las dificultades que tiene las mujeres de poder abandonar el ámbito privado y de ascender en el ámbito laboral. La secretaría opina que además, con los planes de igualdad, se podrá “prevenir y combatir esa violencia específica que se produce con frecuencia en los centros de trabajo y que está en gran parte invisibilizada, que es el acoso sexual y el acoso por razón de sexo”.
Foto: archivo de AmecoPress.
Estado Español - Empleo - Empresarias - Empleo y género - Brecha salarial - Acoso sexual - Sindicatos. 10 mar. 2022. AmecoPress.