Genialogías presenta dos nuevos números de poesía escrita por mujeres
Madrid, 2 jul. 18. AmecoPress.- Unas personas cruzan en bicicleta tras la ventana. La ventana que da al Parque del Retiro de Madrid y que pertenece al edificio de la Biblioteca Pública Municipal Eugenio Trías. La ventana tras la que hoy, 30 de junio, tiene lugar la presentación de dos libros que pertenecen a la Colección Genialogías —que edita la asociación de mujeres poetas Genialogías y la Editorial Tigres de Papel—. La ventana que separa el afuera del adentro y que, en esta tarde tibia de verano, acoge y muestra la poesía.
Detrás de esa ventana, dentro del edificio, una multitud de personas —sobre todo mujeres— se sienta a esperar que empiece el acto. Las protagonistas del encuentro son las poetas Ángela Figuera Aymerich y Esther Zarraluki. Ambas estrenan libro que ya había sido publicado anteriormente, pero solo Zarraluki podrá leer sus poemas. Para dar voz a los de la difunta Figuera, algunas de las integrantes de Genialogías y la misma sobrina de la poeta prestan su voz.
El libro de Figuera es ‘El grito inútil’, un título que ya casi se había perdido y que, por primera vez, se edita de forma independiente. “Publicar a una poeta que ya no está es muy difícil pero ha quedado muy bien”, dice María García Zambrano, presidenta de la asociación.
Los libros de esta colección son los números 5 y 6 de una iniciativa conjunta de la editorial y de Genialogías, una organización afincada en Madrid que cuenta con más de 60 integrantes y que tiene como objetivo recuperar las voces de aquellas poetas españolas que han quedado en la sombra.
La primera en leer en esta tarde, es la sobrina de Figuera, Ángela Figuera Álvarez, que ha elegido el poema “Rebelión”, un texto que, según ella, refleja muy bien el espíritu del poemario y da cuenta de lo importante que era para su tía el tema de la maternidad.
Tras la ventana, una señora señala hacia el interior del edificio mientras continúa la lectura. Ana Mañeru, María García Zambrano, Diana Bujarrabal, Isabel Navarro y Ana Ares son las otras encargadas de dar vida a las palabras de Figuera.
’El grito inútil’ no está solo compuesto de poemas. El libro contiene, además, diversos artículos y cartas sobre la obra de la poeta —de personalidades como León Felipe, Amalia Iglesias o Sharon Keefe Ugalde— y un prólogo escrito por Nieves Muriel, que ahora tiene la responsabilidad de hablar sobre la figura y trayectoria de Figuera.
“Cuando yo empecé a leer a Ángela Figuera quedé desbordada”, dice Muriel. Para la poeta e investigadora, en la poesía de esta gran escritora del siglo XX hay una necesidad de relato, de retrato, de autobiografía y de política muy característica que se convierte en algo generacional. “Suceden muchas cosas cuando leemos a Ángela Figuera. Cualquier etiqueta queda desbordada, como le ocurre a cualquier excelsa del siglo XX”.
Para Muriel, la poesía de Figuera —tan en conexión con la oralidad y lo popular—contiene un compromiso político que se sale del canon clásico de la poesía política en la que han participado la mayoría de los hombres. “Lo que Ángela Figuera pone en juego es esa mirada de lo universal, de hacer que el mundo sea más amplio. En ella caben mujeres, niños…”.
Continúa diciendo que Figuera se coloca en otro lugar con respecto a sus coetáneos pero que con sus coetáneas no ocurre lo mismo, pues todas ellas la miraban y dialogaban entre sí. “Y hacían genealogía”, afirma. Muriel recuerda que siempre ha habido mujeres poetas que leían a sus coetáneas.
El tiempo corre y aún queda la presentación del libro de Zarraluki, así que la autora del prólogo de ‘El grito inútil’ finaliza su intervención diciendo: “Acérquense a leer a Ángela Figuera porque es una fuente de esas que da más sed”.
Esther Ramón es la encargada de presentar el libro de Zarraluki y, además, es amiga y admiradora de la poeta. “En la poesía de Zarraluki está la luminosidad pero también está la posibilidad de lo oscuro”, explica Ramón.
‘Cobalto’ es un libro que ya había sido editado hace años pero que ahora la Colección Genialogías vuelve a rescatar. “La vida de los libros de poesía es brevísima y que ‘Cobalto’ vuelva a ver la luz es gracias a Esther Ramón, a Genialogías y a Virginia Trueba”. Esta última autora ha sido la encargada de prologar un libro que, además del poemario, incluye una entrevista que Isabel Navarro le hizo a la autora.
Dice Zarraluki que, para ella, esta presentación es como cerrar un ciclo con Figuera, una autora que ha tenido una importancia clave en su vida. “Estamos aquí para negar el título [El grito inútil] de Ángela y estamos todas dispuestas a morder la manzana, como ella quería, y a seguir luchando”, termina la poeta. Zarraluki piensa que lo que une a su poesía y a la de Figuera es ese deseo por “despellejar la realidad”.
Ahora toca guardar silencio y escuchar cómo Zarraluki pone voz a sus propios poemas. Mientras, a través de la ventana, la gente continúa su paseo por el Retiro. Alguna de esas personas se preguntará, tal vez, qué estará ocurriendo dentro de la biblioteca.
Fotos: Esther Muntañola.
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Cultura – Voces de Mujeres – Cultura y arte – Libros – Escritoras – Mujeres creadoras. 2 jul. 18. AmecoPress.