El trabajo de Caminando Fronteras y Helena Maleno no se detiene con la pandemia
Madrid. 11 ene. 2020. AmecoPress.- El colectivo Caminando Fronteras asegura que la crisis generada por la Covid-19 incrementa el índice de mortalidad en las migraciones y denuncia la muerte de 2.170 personas en las fronteras españolas durante 2020. La plataforma recoge información exclusiva y en tiempo real sobre las fronteras y las diferentes rutas migratorias de acceso al Estado español, fruto de más de dieciocho años de trabajo en terreno los 365 días.
Desde el año 2002, Caminando Fronteras actúa como “colectivo en defensa de los derechos de las personas y las comunidades migrantes” en la frontera Occidental Euroafricana. Además, lo hacen con una “perspectiva transnacional, transcultural, antirracista y feminista mediante la cual denuncian las fronteras como espacios de impunidad”. Helena Maleno, periodista fundadora y directora de la organización, denuncia el aumento del número de víctimas mortales con respecto a los dos últimos años. “Estos números son un fracaso y una vergüenza. Son los más mortíferos de los últimos años”, declaraba en una rueda de prensa a finales del 2020.
En este último año, la crisis pandémica de la Covid-19 ha afectado inclusive a los movimientos humanos. “No obstante, las personas se siguen moviendo y más en países de tránsito como es Marruecos”, declara Ernesto, integrante del colectivo. El Ministerio del Interior afirma registrar un crecimiento del 28% en el número de personas que arriesga su vida en estas rutas, además, desde la asociación aseguran que el porcentaje de personas que mueren ha aumentado un 143% con la pandemia. Esto se puede traducir en una mayor inactividad por parte de los Estados de llegada de los movimientos migratorios sobre la cual, Caminando Fronteras trabaja en una transformación hacia herramientas telemáticas y comunicativas. “Las migraciones se siguen dando, pero además asumiendo un mayor índice de precariedad y mortalidad", por eso son necesarias nuevas formas de actuar.
Por la necesidad actual de una transformación en la lucha por los derechos de estas personas y la dificultad que supone la crisis actual, la asociación ha creado diversas herramientas digitales en pro de estas acciones. Así, en la web se monitorizan las principales rutas migratorias que componen el territorio sur del Estado español, como la Ruta Migratoria Canaria -con el índice de mortalidad más elevado-, en la que se contabilizaron 45 naufragios procedentes de países como Marruecos, Senegal y Mauritania. Datos como este se conocen gracias al estudio realizado durante dieciocho años de la relación y la comunicación establecida de las y los migrantes con su país y su familia de origen. Normalmente, son estas últimas las que se ponen en contacto con el colectivo para denunciar la desaparición de conocidos, incluso madres y padres que desconocen la situación de sus hijos e hijas.
También la plataforma recoge todos los datos y las historias de víctimas y victimarios de estos “no lugares”, es decir, de aquellas personas que desaparecen o pierden la vida en las fronteras y las empresas que se aprovechan de estas situaciones de vulnerabilidad. Por eso se registran las “tragedias” sucedidas en estas rutas, algunos perfiles de personas en búsqueda e historias en las que Caminando Fronteras pretende servir de apoyo y justicia. “Englobamos en “Tragedias” todo evento trágico que sucede en las fronteras, puntuales o en masa”, declara Ernesto, “normalmente, estas tragedias tienen que ver con naufragios, desapariciones o muertes”. A lo largo de su trayectoria, ha acompañado a las familias y comunidades a las que pertenecen las víctimas con visibilidad y apoyo entre otras acciones y, desde la asociación, aseguran que la pandemia ha empobrecido aún más a los países de origen.
Pasividad Institucional
En su misión por visibilizar la gravedad del problema en las fronteras con la situación actual, Caminando Fronteras denuncia una mayor inactividad por parte de las Administraciones Estatales tanto de España como de los países de origen. Reclama una falta de coordinación institucional cuando se trata de la salvaguarda de Derechos Humanos y la lucha contra la industria del control migratorio, la cual ve aumentada su impunidad en base a la vulnerabilidad de las personas. “Con estas muertes hay gente que gana mucho dinero”, afirma el colectivo haciendo referencia a la pasividad de los Estados ante la trata de migrantes, “al fin y al cabo, nuestro trabajo también pasa por reivindicar el derecho de estas personas a una muerte digna”.
Toda la información sobre la plataforma en caminandofronteras.org.
Foto: Archivo AmecoPress.
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