8M: más allá de la huelga feminista

25 de febrero de 2020.

Por Gloria López

Madrid | Estado Español | Política y género | Feminismo | Movimiento feminista



Habrá revuelta, habrá manifiestos y acciones en los barrios, también habrá manifestación


Madrid, 25 feb. 20. AmecoPress.- El día 8 de marzo de 2020 en Madrid las mujeres no han sido llamadas a la huelga. En Barcelona sí. Otros territorios están decidiendo su postura, en las asambleas en las que se coordinan, además, las movilizaciones y actividades que tendrán lugar no solo el mismo día internacional de las mujeres, sino antes y después de esta fecha para la que España se ha convertido en referente. No es falta de consenso ni agotamiento de lo que siempre se consideró una herramienta, la huelga, es que “este año queremos mostrar que un día no nos basta”, asegura Ruth Caravantes Vidriales, una de las voceras de la Comisión 8M Madrid con la que ha conversado AmecoPress.

El 8 de marzo de 2018 tuvo lugar la primera huelga feminista de la historia de nuestro país, inspirada en las movilizaciones masivas que sacudieron Polonia -contra el proyecto de ley del Gobierno que restringía derechos reproductivos de las mujeres- y Argentina -contra la violencia machista- en 2017 y que tuvieron un eco mundial, llegando a fraguar la idea de una huelga de mujeres global.

Así describe el proceso el argumentario de la Comisión 8M (que aglutina a diferentes asambleas y organizaciones feministas y trabaja por consensos) de 2018: “Al grito de “ni una menos, vivas nos queremos” que lanzaron las feministas argentinas se llevó a cabo la primera huelga global de mujeres de trabajo productivo y reproductivo el 8 de marzo de 2017. Millones de mujeres de 70 países, desde Argentina a Polonia, desde Turquía a Estados Unidos, desde Brasil a Italia pasando por nuestras tierras, nos contagiamos y ocupamos las calles para hacer visibles nuestros trabajos, nuestras demandas y nuestros cuerpos”.

Efectivamente, en el encuentro estatal celebrado en Zaragoza en enero de 2018 se acordó convocar una huelga feminista: laboral, estudiantil, de cuidados y de consumo de 24 horas, bajo el lema “Si nosotras paramos, se para el mundo”. Los sindicatos mayoritarios -UGT y CCOO- convocaron paros de dos horas. Otras fuerzas sindicales como CGT o CNT, dieron cobertura legal a la huelga las 24 horas.

Un año más tarde, la huelga feminista se convocó de nuevo. Hubo dos encuentros estatales en Gijón y en Valencia en los que se apostó por esta herramienta común. Otra vez los sindicatos minoritarios dieron el respaldo legal a las 24 horas de huelga y los mayoritarios llamaron a los paros de dos horas.

Este “proceso”, insisten las organizadoras, provocó un “desborde”, en el mismo concepto de huelga, hasta ahora vinculado exclusivamente con el ámbito laboral, y en la participación, desde el eventazo, hasta la manifestación central. “La idea era hacer músculo”, explica Ruth Caravantes Vidriales, y dar visibilidad a cómo nos afecta a la vida de las mujeres las cuestiones que el feminismo llevaba tiempo planteando”. “En 2018 logramos levantar la alfombra del hogar” y en 2019 seguimos “visibilizando las demandas del feminismo y, aumentar la participación de los barrios y pueblos”, añade la activista, “resignificando el concepto de huelga, que trasciende lo laboral”.

La huelga feminista logró transmitir un mensaje claro. “Logramos hacerlo entender”, dice Ruth, “las mujeres sentían ‘el feminismo habla de mí’”. Su campo de experimentación son los diálogos con su madre y sus tías. “La mayoría de las mujeres se hicieron conscientes de quién organiza las navidades, quien recuerda que hay que llamar porque se celebra un cumpleaños en la familia, quiénes sostienen las redes familiares tan importantes cuando vienen mal dadas”.

Un día no basta

Este 2020, no se ha convocado una huelga feminista el 8M. Y no es porque el ocho de marzo caiga en domingo. Es que en esta ocasión “un día no basta”. Por eso, desde la Comisión 8M Madrid han optado por una revuelta feminista de un mes -del 8 de febrero a 8 de marzo-, un concepto en el que incluyen diferentes actividades con la intención de “descentralizar y ampliar”.

En realidad, tal y como está planteada la revuelta, es un paso hacia delante, un avance. Porque uno de los logros de las dos convocatorias de huelga fue precisamente que el tejido feminista se vio fortalecido y hoy está en condiciones de plantear actividades diversas de manera autónoma y simultánea en distintos lugares.

Hay muchos ejemplos que constatan este crecimiento, pero quizás las Jornadas Feministas celebradas entre el 1 y el 3 de noviembre en Durango (País Vasco) en las que 3000 mujeres participaron y debatieron sobre múltiples temas, son una buena muestra de fuerza del movimiento feminista.

En 2017 había cinco asambleas del 8M participando en la comisión y este año son más de cien, con una importante implicación de gente joven. Por ello, consideran un momento oportuno para apostar por la "descentralización". “Quienes se movilizan por una educación sexual son distintas a las que van a una concentración antirracista, hay asambleas en muchos barrios, pueblos y ciudades. Y el día 8 habrá manifa, lectura de manifiesto en los barrios, caceroladas. Todo eso es el 8M”, argumenta la vocera de la Comisión 8M.

Para Ruth Caravantes la cadena feminista del 8 de febrero, con la que se daba inicio a la “revuelta feminista” y en la que participaron 7000 mujeres, ya demuestra que “vamos bien”. A partir del 8 de febrero, las feministas madrileñas se vienen movilizando en torno a cuatro ejes: economía, fronteras, antirracismo y cuerpos.

De este modo desde el movimiento feminista se trabaja para seguir sensibilizando y creando conciencia y, a la vez, para ampliar el movimiento en barrios y pueblos, lo que permitirá una verdadera transformación, más allá del 8M.

Un movimiento que además “vive una pugna por el relato”, en palabras de Ruth, lo que “significa que el feminismo está muy fuerte”. La activista lamenta el tono que a veces alcanzan los debates, sobre todo en las redes, pero asegura estar más preocupada por el avance de la derecha y la ultraderecha que por los debates internos.

Este año, el lema elegido por la Comisión 8M de Madrid es: ‘Con derechos, sin barreras, feministas sin fronteras’. El día 8 de marzo, a las 00:00 h habrá cacerolada, a las 12:00 h tendrá lugar la lectura del Manifiesto 8M 2020 en Barrios y Pueblos de Madrid y por la tarde, manifestación, desde Atocha (comienza a las 17:00 h) hasta Plaza de España.

Foto: archivo AmecoPress

Política – Política y género – 8M – Movimiento feminista. 25 feb. 20. AmecoPress

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