Las músicas se organizan para reclamar sus derechos
Madrid, 22 junio. 17. Amecopress. El Día de la Música, que se celebra el 21 de junio, es un día para celebrar, pero también, en el caso de las mujeres, una fecha para reivindicar. La visibilidad de las mujeres en el sector sigue siendo escasa. La ley de Igualdad no se cumple a la hora de programar festivales, muchos de ellos financiados con fondos públicos, ni en la composición de jurados. La música, poco valorada en el proceso educativo de las nuevas generaciones, aparece sin referencias femeninas en los libros de texto. Pero, a pesar de la tendencia a naturalizar esta situación con argumentos para nada rigurosos –siempre ha sido así, no hay mujeres que compongan música ni que monten una banda de rock…-, son varias las iniciativas que han decidido plantar cara a la discriminación.
Porque efectivamente hablamos de discriminación. Según un estudio que publicó en marzo Ticketea, en los 20 festivales más grandes de España para 2017, solo 154 de los 1.006 artistas confirmados son mujeres o bandas que incluyen mujeres entre su formación principal, es decir, el 15%. El porcentaje de mujeres músicas en programación oficial de los conservatorios puede ser del 0,5%. La plataforma de venta de Ticketea constata, curiosamente, que durante el año pasado, de los 1.6 millones de personas que compraron una entrada en el portal, el 55% fueron mujeres.
“Vivimos en una estructura social patriarcal y sus dinámicas se reproducen en todos los ámbitos, muchas veces de manera silenciosa”, afirma el manifiesto de presentación de Mujeres y Música (MYM), una organización que nació con el objetivo principal de “visibilizar y combatir estas dinámicas machistas en el sector musical para alcanzar un escenario de equidad en el que el género no limite las oportunidades, ni los roles a interpretar y no condicione la respuesta del público”. Entre sus iniciativas está la creación de una base de datos de mujeres músicas para facilitar el descubrimiento de nuevas artistas clasificadas por géneros, países, épocas, instrumentos… Este directorio busca ser también un recurso para las y los profesionales que programan festivales y conciertos que desean romper la brecha de género y el círculo vicioso de la infrarrepresentación programando mujeres en sus eventos musicales.
“Un colectivo como MYM no debería existir. Porque el género no debería ser un factor a tener en cuenta en la creación o la valoración musical. Sin embargo, existimos porque es necesario denunciar la situación, dar voz a las mujeres y proponer soluciones. Soluciones que deben llegar por parte de la industria, pero también por parte de las mujeres músicas”, argumentan desde la organización.
Son reflexiones compartidas, con diversos matices, por las protagonistas de un corto documental que recopila el testimonio de 14 mujeres que han logrado romper el techo de cristal en la industria musical, dirigido por Daniela Bosé, directora general de la compañía BMG. "Las pocas que llegan a lo más alto, sean artistas o managers, son heroínas. Y esas heroínas son pocas y poco visibles. Por tanto, no hay referencias, no hay modelos que inspiren. Cuantas más referencias haya, habrá más mujeres en la profesión", dice Celia Carrillo, jefa de Marketing de Ticketmaster, en el vídeo.
Diana Pérez Custodio es compositora, en activo, en España. En una entrevista con AmecoPress explica que ser compositor o compositora es una “misión imposible, si se pretende vivir de este trabajo de creación”. Pero el hecho de ser mujer y compositora parece que añade “dificultades adicionales”. Es casi una “tarea heroica”. “La cruda realidad es que es prácticamente imposible conciliar la vida personal y profesional. En el caso de las mujeres tenemos peculiaridades ineludibles; si queremos ser madres, hay que embarazarse, parir, amamantar. Y luego están las eludibles, que por desgracia todavía nos caen encima porque culturalmente sigue siendo así. Se puede contrarrestar esa falta de apoyo institucional con dinero, pero si te dedicas a la composición no lo puedes hacer porque no cuentas con recursos”.
Asociación de Mujeres en la Música
Esto sucede en la composición. También en el caso de las intérpretes. Y en la dirección de orquesta. “Los gestores se acuerdan de hombres para las programaciones en festivales y certámenes”, afirma Pilar Rius, guitarrista.
Pilar Y Diana colaboran en muchas ocasiones y forman parte de la Asociación Mujeres en la Música, una organización fundada en 1989 gracias a la iniciativa de la compositora María Luisa Ozaita. En la actualidad cuenta con más de cien asociadas que abarcan los campos de la creación, interpretación, musicología, docencia, pedagogía y gestión. La finalidad de la asociación es potenciar, divulgar y promocionar la presencia de las profesionales de la música en la historia y en la actualidad.
Anualmente programan conciertos y festivales en los que se interpretan obras de autoras de otras épocas y actuales. Destacan el Festival Mujeres en la Música de Getxo (Bilbao-España) y la colaboración con la red Off Arteria que les permite organizar mesas redondas y conciertos en diversas ciudades españolas: Madrid, Barcelona, Valencia entre otras. También organizan encuentros, presentaciones de libros, discos… con el fin de dar a conocer la literatura y discografía musical de mujeres.
También desarrolla el ciclo “Música de Mujeres en las Aulas”. “Esta iniciativa trata de instituir un mes al año en el que en todos los centros de enseñanza musical en España, o al menos en todos aquellos a los que podamos llegar, se organice un concierto con música de mujeres interpretada por alumnos de todas las edades”. En esta tercera edición ya se han sumado once conservatorios de Madrid, Zaragoza, Canarias, Segovia, Oviedo.
“Consideramos primordial que los estudiantes conozcan el repertorio de las mujeres compositoras y cuestionen ciertos aspectos acerca del mismo, como su escasa presencia en las programaciones educativas, y con ello conseguir que el repertorio de música de mujeres sea algo habitual en su día a día”, explica Pilar.
Luchar contra la discriminación de las mujeres en la industria musical es un objetivo compartido por MIM (Asociación de Mujeres en la Industria de la Música), que nació en septiembre y cuenta con 120 socias en distintos planos profesionales del sector y varias comisiones de trabajo, desde la orientación profesional y artística hasta investigación que permita elaborar una radiografía de la situación.
La exclusión y la falta de reconocimiento de las mujeres en la música es una inercia que viene de muy atrás. Aunque hemos avanzado, el fenómeno de la exclusión de las mujeres sigue siendo habitual. Hay iniciativas y colectivos muy reivindicativos que señalan cada uno de los casos que aparecen en el horizonte. Uno de ellos, el colectivo feminista ’Territorio de Nabos’, remueve conciencias a golpe de hashtag: #sinmujeresnovoy . Con sus gráficos y estadísticas, denuncia injusticias. ’Territorio de Nabos’ nació en 2016 como iniciativa que quiso denunciar la nula visibilidad femenina en el festival sevillano Territorios. A partir de ahí el proyecto se fue ampliando a otros festivales, la movilización se fue haciendo mayor y ahora continúan su trabajo con labores de sensibilización en el camino de la Igualdad y promoviendo un trabajo colaborativo de recuento que denuncie la paupérrima presencia de mujeres en los festivales. Así, explican: “En la mayoría de los festivales estudiados las mujeres difícilmente llegan al 5% e incluso en varios ha sido del 0%. A partir de ahí, también nos hemos interesado en la presencia de la mujer en otras facetas dentro del festival (staff, organización…) y nos llama mucho la atención que ahí la representación femenina sí es más destacada, aunque no en puestos de relevancia. Este es el caso sobre todo del personal de los departamentos de comunicación que algunos festivales tienen”.
El papel de las mujeres en todo el proceso de la creación y transmisión musical ha sido fundamental y, al igual que la música ha evolucionado, las mujeres se han ido desenvolviendo dentro de este arte con grandes dificultades y rompiendo importantes brechas marcadas por las diferencias de género prevalecientes desde la Antigüedad. Pero hay que seguir avanzando. “No podemos lograr un escenario más justo en solitario. Hay muchas mujeres y colectivos luchando por cambiar la situación. Mucho trabajo ya hecho, mucho esfuerzo, mucha experiencia y mucho conocimiento acumulado. Pongámoslo en común. Trabajemos juntas para levantar la voz y llegar más lejos”. Afortunadamente cada vez más mujeres comprender esto. Algo grande que celebrar, en este día internacional de la música.
Fotos AmecoPress
Cultura – Música – Mujeres creadoras; 22 de junio. 17. AmecoPress