AENA vulnera el principio de igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres en la selección de personal

27 de octubre de 2008.

Por Gloria López

Economía | Madrid | Empleo y género



Una de las mujeres que aprobó la oposición pero no obtuvo plaza ha llevado el caso a los tribunales


El quince de febrero de 2006 Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) convocó una oposición para la adjudicación de 151 plazas de bombero o bombera. De las mujeres que se presentaron a las pruebas, ocho superaron el proceso selectivo, pero ninguna de ellas ha logrado ocupar una de las 151 plazas a las que concurrían, debido a que la puntuación conseguida era inferior a la de los hombres y no se respetó la reserva de plazas destinadas a mujeres del cinco por ciento, exigido por ley para procesos en los exista infrarrepresentación de personas de alguno de los dos sexos, como sucede en este caso específico. Sindicatos y tribunales reconocen que el proceso de selección fue claramente discriminatorio. Las afectadas reclaman que “todavía hay solución”.

El sindicato CCOO ha denunciado en un comunicado que Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) ha vulnerado el principio de igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, recogido en el artículo 14 de la Constitución, en la selección de personal realizada por el ente para la adjudicación de 151 plazas para personal Técnico de Equipamiento y Salvamento por oposición.

El Plan para la Igualdad de Género en la Administración General del Estado (AGE) establece que "todas las convocatorias de procesos selectivos que realice la AGE para el acceso al empleo público, tanto en cuerpos generales como especiales, incluirán un párrafo que señale si existe en el correspondiente cuerpo infrarrepresentación de personas de algunos de los dos sexos". Así mismo, establece la reserva, en ese caso, de al menos el 5 por ciento.

En el proceso de selección de personal de la oposición de la Oferta de Pública de Empleo para la adjudicación de 151 plazas de bombero o bombera para la empresa AENA, no se ha cumplido con el principio de igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, ya que éstas tuvieron que superar las mismas pruebas físicas que los hombres, con la clara y evidente discriminación por razón de sexo para las mujeres. Tampoco se respetó la reserva del 5 por ciento de las plazas exigido por la ley.

Todavía hay solución

Una de las ocho mujeres que sufrieron la discriminación en el proceso de selección llevado a cabo por AENA y aprobaron la oposición, Regina Galán, ha llevado el caso a los tribunales. Las sentencias, tanto del Juzgado en primera instancia, como la del Tribunal Superior de Justicia de Granada, confirman la vulneración del Derecho Fundamental a la igualdad entre hombres y mujeres. Esta confirmación de vulneración de derechos no ha permitido, sin embargo, a las mujeres discriminadas lograr el puesto de trabajo, porque una vez resuelto el proceso y adjudicadas las 151 plazas a 151 hombres, los derechos de dichos candidatos son inamovibles.

Regina, en declaraciones a AmecoPress, explica que “todavía hay solución. Los tribunales reconocen que la empresa ha vulnerado un derecho fundamental y, por tanto, tiene que reparar el error que ha cometido. En este momento estamos a la espera de que el Tribunal Supremo establezca el modo en el que debe ser hecha esa restitución. Nosotras estamos pidiendo algo que es fácil: que se establezca una bolsa diferenciada con las mujeres que superamos las pruebas y se nos priorice en el acceso a la plaza tal y como establece la ley, reservando el cinco por ciento. No queremos echar a nadie ni quitar ningún puesto de trabajo”

La denuncia de Regina Galán, que pertenece al Aeropuerto de Granada, ha sido seguida por la de su compañera Barbara Notario, del Aeropuerto de Alicante, que se encuentra en la misma situación. A la actuación judicial, estas mujeres han añadido una labor divulgativa y de contacto con instituciones y responsables políticos para “colaborar en la difusión de esta injusticia y contribuir a que estos casos no se sigan repitiendo”, afirma Regina, y continúa diciendo que “sabemos que todo lo que nos está sucediendo y la presión que tenemos es porque todavía vivimos en un patriarcado, y necesitamos concienciar a la sociedad para que las mujeres no sean discriminadas ni violentadas.”


Economía – Empleo y género; 27 octubre (08) AmecoPress

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