Zapatero asegura que la tasa de actividad femenina estará por encima del 60% en la próxima legislatura

El presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, afirmó hoy que son muchos los hogares que se han beneficiado de las medidas sociales promovidas durante esta legislatura, como la Ley de Dependencia o la prestación de 2.500 euros por nacimiento o adopción. Durante un desayuno informativo, Zapatero fijó además algunos de sus retos para la próxima legislatura en caso de que vuelva a ganar las elecciones, como situar el índice de paro en el 7% y aumentar la tasa de actividad femenina por encima del 60%.

“Contemplamos para la próxima legislatura la creación de 1.600.000 puestos de trabajo, pero yo soy más ambicioso y estoy dispuesto a liderar un mayor esfuerzo colectivo para acercarnos a los 2.000.000 puestos nuevos, para situar la tasa de paro en torno al 7%, para alcanzar una tasa de actividad media por encima del 70%, para llevar la de las mujeres por encima del 60% y para reducir la temporalidad hasta un 25%”, señaló el presidente.

Para hacer efectivas esas promesas, anunció algunas medidas a adoptar como la extensión de las escuelas infantiles de 0 a 3 años, el desarrollo efectivo de la ayuda a la dependencia, o la creación de empleo más estable y de calidad. Zapatero quiere hacer de esos propósitos el motor del bienestar, para “situarnos entre aquellos que combinan una alta renta media con los mejores indicadores sociales”.

“Para ello es condición indispensable avanzar decididamente en productividad, seguir mejorando nuestra capacidad de competir y asegurar la plena incorporación de la mujer al mercado de trabajo”, destacó.

Precisamente en el ámbito laboral, el presidente apuntó la intención de renovar un gran acuerdo con los interlocutores sociales “para poner en marcha nuevas medidas de mejora de la productividad general de la economía y de la calidad en el empleo”.

 “Todo ellos nos va a permitir desarrollar políticas sociales de gran relevancia, aplicar en su plenitud la Ley de la Dependencia, dar otro salto importante en la mejora de las pensiones mínimas, promover la edificación de un millón y medio de viviendas protegidas en los próximos diez años, elevar el salario mínimo a los 800 euros en la próxima legislatura y llevar a la práctica la Ley de igualdad”.

Zapatero destacó que las medidas sociales que han promovido durante esta legislatura “han proporcionado avances en numerosos colectivos que, sumados, constituyen una parte muy amplia de nuestra realidad”; por ejemplo, “a los centenares de miles que perciben salario mínimo que ha pasado de 460 euros a 600, a quienes han comenzado a percibir la pensión de la dependencia, a quienes en pocas semanas accederán a la Renta Básica de Emancipación o a quienes han recibido la nueva prestación de 2.500 euros por nacimiento o adopción”.

Polémica con la Iglesia

En cuanto a las últimas manifestaciones de la Iglesia sobre la disolución de la familia y la democracia, el presidente calificó sus declaraciones de “exageradas” y aseguró que las leyes han ampliado y consolidado derechos individuales: “Reformamos la Ley del divorcio y dicen que hay más divorcios. No hay más divorcios, lo que pasa es que la gente antes tenía que esperar un periodo de separación para separarse y la ley ha tenido el acierto de dar el cauce para evitar tiempos de sufrimiento y de convivencia absurda”.

“Es simplemente respetar los derechos individuales y me resulta realmente llamativo que a estas alturas volvamos con temas tan evidentes como querer imponer a la gente que si se ha acabado la convivencia y las ganas de convivir como pareja tengan que estar condenados a convivir”, agregó.

El presidente del Gobierno tan sólo hizo una breve mención a la polémica sobre el aborto: “Comprendo que la Iglesia no esté de acuerdo con la interrupción voluntaria del embarazo -que en este país lleva años la misma ley sin modificarse y ahora parece que otra vez se pone en cuestión- o que no estén de acuerdo con el matrimonio entre personas homosexuales. Lo respeto, pero no es asumible decir que eso es un ataque a los derechos humanos o destruye la familia o es una disolución de la democracia, primero por irreal, y segundo porque no es verdad”.

“La democracia supone ante todo el respeto a la pluralidad, igual que todos tenemos la obligación de respetar la mentalidad de familia cristiana, que tiene todo el amparo de la Constitución. Para lo que no tienen amparo es para pedir que aquellas personas que tengan otras creencias, convicciones, opciones, no puedan ejercerlas”, aseguró Zapatero.

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Fotos: AmecoPress

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Estados español – Política y género – 9 enero, 08 (AmecoPress)