Arranca la segunda edición de Girls´Day en la Universidad de Oviedo
Madrid, 07 marzo 2011. En el Aula Magna del Aulario Sur de la Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón, el próximo 9 de marzo se realizará la segunda edición del Girls´Day en la Universidad de Oviedo.
El Girls´Day es una iniciativa desarrollada a nivel internacional, en la que han participado, diversas universidades españolas como la Universidad de Zaragoza o la Universidad Politécnica de Cataluña. Por otro lado, Girls´Day ha sido realizada en Estados Unidos, como también en países europeos, como Alemania, Holanda, Luxemburgo, Polonia, Austria, Kosovo o Suiza.
Tras el éxito de la primera edición de esta actividad en Asturias, en el año 2009, la Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón vuelve a ponerla en marcha, con la colaboración del Vicerrectorado de Estudiantes y del Campus de Excelencia Internacional de la Universidad de Oviedo, la Fundación Universidad de Oviedo y el Colegio Oficial de Ingeniería Técnica Industrial del Principado de Asturias.
El objetivo de esta actividad es acercar al alumnado de la ESO y Bachillerato a los estudios técnicos, para despertar su interés por la Ciencia y la Tecnología, y aumentar el número de mujeres que se matriculan en este tipo de carreras.
Por ello, más de ciento veinte alumnas y alumnos de secundaria de distintos centros asturianos visitarán las instalaciones de la Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón el próximo miércoles, donde asistirán a una mesa redonda con ingenieras del ámbito académico y profesional, y visitarán los laboratorios del centro.
Justificación de Girls’Day
Actualmente, según informaron los organizadores más mujeres que hombres obtienen un título universitario, el 60 por ciento de tituladas en todas las materias en la Unión Europea, las mujeres siguen concentrándose en sectores tradicionalmente feminizados y, a menudo, peor remunerados tales como sanidad y servicios asistenciales, educación, entre otros. Además, ocupan menos puestos de responsabilidad en todos los ámbitos de la sociedad.
La caída de las economías europeas en los últimos dos años evidencia, más que nunca, la necesidad de aprovechar todos los potenciales recursos disponibles para el lanzamiento de una nueva economía basada en la investigación y el conocimiento, que procure un crecimiento inteligente y sostenible para toda Europa.
En este sentido, es necesaria una mayor incorporación de mujeres a las carreras y sectores científico-tecnológicos e incrementar la ocupación en estas actividades, pues de ellas dependerá el crecimiento futuro de los Estados miembros. Además, se necesita aumentar el número de personas formadas y empleadas en este tipo de ocupaciones, pues se entiende que serán las más demandadas en el futuro, y los países europeos no se pueden permitir perder efectivos en su mercado de trabajo.
En España, el 54,6 por ciento del alumnado matriculado en las Universidades en el curso 2008-2009 eran mujeres, así como el 60,9 por ciento del alumnado que terminó sus estudios. Las mujeres constituyeron en ese mismo curso académico el 52,7 por ciento de los estudios de Master y el 48,8 por ciento de las tesis leídas (Estadística de la Enseñanza Universitaria publicada en 2010, INE, Curso 2008-2009).
A pesar de un ligero incremento de la matriculación femenina en las carreras técnicas, las más masculinizadas, y por otro lado hubo un ligero descenso en la elección de las especialidades relacionadas con la rama de Humanidades, las mujeres han incrementado su presencia en las carreras relacionadas con las especialidades sanitaria y Socio-jurídica.
Esta segregación formativa y ocupacional que, lejos de suavizarse en los últimos años, no ha hecho más que profundizarse. De hecho, las mujeres siguen concentrándose en el sector servicios en un 88 por ciento, en ocupaciones relacionadas con aquellas especialidades formativas que definen su presencia en las aulas.
El problema es que esos ámbitos en los que se ocupan, suelen caracterizarse por unas peores condiciones laborales, una mayor inestabilidad y temporalidad y unos niveles salariales más bajos. Todo esto, junto con otros factores, favorece las ya conocidas diferencias salariales que presentan mujeres y hombres en el mercado laboral.
Fotos AmecoPress
--------------------
Autonomías – Educación – Formación en género; 07 marzo (11); AmecoPress