El grupo de Teatro ‘Delirio’, que dirige Júlia Bel y Eva Hibernia, representan ‘Trece Rosas’ dentro del programa por la recuperación de la memoria histórica
Uno de las capítulos más sangrientos de la represión franquista inicial, la ejecución sumarísima en Madrid, en agosto del 39, de trece jóvenes, la mitad de ellas menores de edad, se está empezando a conocer entre el gran público gracias a la película recién estrenada de Emilio Martínez-Lázaro, la obra de teatro del grupo Delirio y exposiciones en Madrid y Barcelona.
La Compañía Delirio, formada por la poeta y dramaturga catalana, Júlia Bel, y la actriz y directora teatral, nacida en La Rioja, y residente en Madrid hasta el año 2000, Eva Hibernia, fue la primera compañía que recuperó este episodio trágico, y desde hace un año la representa por Cataluña y por el estado español. Trece Rosas obtuvo el tercer premio del certamen de Directoras de Torrejón de Ardoz, celebrado a finales de marzo. Actualmente la obra está incluida en el programa de la Generalitat de Cataluña por la recuperación de la memoria histórica.
Por esta razón, la obra se representó el viernes, en la sala grande del Espacio Francesca Bonnemaison, como un acto más del Primer Coloquio Internacional Memorial Democràtic: Polítiques Públiques de la Memoria, que se celebró en Barcelona, desde el miércoles17 hasta el domingo 21. El teatro estuvo lleno a rebosar, y como ocurrió en su estreno en el teatro Tantarantana, hace un año, los asistentes aplaudieron a rabiar la representación.
Algunos de los presentes eran los mismos ponentes de las jornadas, mujeres y hombres procedentes de diversos lugares del mundo, que aunque algunos no dominaran el castellano, se emocionaban igual que el resto de los asistentes. Este “reestreno” oficial, en Barcelona ha coincidido con el estreno de la película, a la que también se le augura un futuro de premios y reconocimientos.
Este montaje, que suma música original interpretada en directo, canciones, poesía y una visión muy personal, a la vez que universal, permite acercarse a los valores de la República a través de la vivencia de estas jóvenes muchachas, la mayoría menores de edad, que fueron injustamente condenadas a muerte en los primeros días del franquismo.
El montaje es fiel a los acontecimientos históricos, pero se ha tratado desde una perspectiva original. Destaca la delicada, emocional y puntillosa labor de dirección, la escenografia de Runat Etshak, artista israelita residente actualmente en Barcelona, que ha creado como escenografía un cuadro que representa un muro, así como el trabajo apasionado de las actrices.
Por cuestiones de maternidad y otros compromisos algunas de las intérpretes iniciales han cambiado. La obra, que asemeja en estilo y poesía a una obra ‘lorquiana’, recrea la peripecia vital, la solidaridad y el valor de las adolescentes durante su calvario en la cárcel. Se representa en tres partes, a través de lo que “recuerda” una de las supervivientes, la número 14, que se libró de la muerte, pero pasó muchísimos años en la cárcel. Ellas son cinco mujeres que quieren representar al resto, y no pueden creerse que van a morir. Las actrices son Susana Egea, Eva Hibernia, Carla Caríssimi, Magdalena Tomàs y Susanna Barranco.
Las autoras del texto, han querido hacer justicia moral, recordando especialmente a Julia Conesa, una de las protagonistas, que antes de morir pidió: “lo único que deseo es que mi nombre no se borre de la historia”. ”Estas mujeres que son nuestro referente histórico, explica Bel ”tuvieron ideales y valores, eran personas civiles, jovencísimas, algunas estaban afiliadas a la Juventud Socialista Unificada (JSU), juventudes del Partido comunista, y fueron acusadas de ’auxilio a la rebelión’ y fusiladas frente a la tapia de la que fuera cárcel de mujeres de Ventas de Madrid el 5 de agosto de 1939”.
El proceso de creación escénica para el espectáculo, ha explicado Bel, comenzó precisamente “ese día, el 5 de agosto de 2006, cuando asistimos al acto conmemorativo que todos los años se celebra junto a la tapia del actual cementerio de la Almudena, donde fueron asesinadas”, ha explicado Bel. Desde entonces y durante dos meses, estas dos creadoras, e integrantes también del VACAS (asociación de mujeres de escena) al frente de la compañía barcelonesa ’Delirio’ y de un equipo artístico y técnico compuesto casualmente, por trece mujeres y un hombre, recrearon el hecho histórico que, según ellas “aún resuena en nuestra carne porque las heridas de la guerra también se heredan”.
Trece Rosas también se ha convertido en un espectáculo de danza que está a punto de estrenar la compañía madrileña ’Arriero’. Además, en una de las sedes de la FNAC de Madrid se puede todavía contemplar la exposición fotográfica de Adriano Castoro, sobre el rodaje de la película de Martínez Lázaro, una muestra que viaja a Barcelona , y se verá a partir del día 29 de octubre en la FNAC El Triangle de Plaza Cataluña.
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Fotos: proporcionadas por la Compañía Delirio
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Cultura – Cultura y arte – 22 octubre, 07 (AmecoPress)