Emprendedoras de Andalucía y Marruecos comparten su experiencia empresarial en el medio rural

15 de octubre de 2010.

Por Elena Duque

Economía | Madrid | Internacional | Mujeres rurales | Empresarias



La Fundación Tres Culturas destaca en un seminario la decisiva aportación femenina para el desarrollo sostenible


Madrid, 15 oct (10). AmecoPress. La Fundación Tres Culturas ha clausurado esta mañana el seminario “Mujer y Empresa en el Mundo Rural” que, emplazándolo en Andalucía y Marruecos, ha propuesto una profunda reflexión sobre el momento actual por el que pasan las mujeres en el medio rural y los retos pendientes para avanzar en igualdad de derechos.
 
A lo largo de las diferentes intervenciones se ha enfatizado en el decisivo papel de las mujeres en la revaloración del medio rural como agentes sociales y económicos activos. Las mujeres suponen ya en este entorno un empuje necesario para superar la crisis y promover un desarrollo sostenible.
 
Con motivo de la conmemoración del Día Mundial de la Mujer Rural empresarias de ambos lados del Estrecho de Gibraltar han compartido sus experiencias y han dado a conocer los mecanismos con los que superar los obstáculos habituales como valiosísima contribución para favorecer el emprendimiento femenino, contribuyendo al mismo tiempo al florecimiento del tejido empresarial preexistente mediante la incorporación de la innovación y el desarrollo tecnológico.
 
Inger Berggren, presidenta del Banco Mundial de la Mujer, ha señalado en declaraciones a AmecoPress que la crisis ha modificado la forma de negocio, desaconsejando a las mujeres el inicio de empresas basadas en el comercio al detalle o el turismo rural, un sector ya masificado y por tanto con poca oportunidad de éxito.
 
Sí recomienda, sin embargo, toda aquella iniciativa fundamentada en los servicios de atención a la tercera edad y los servicios sociales, una actividad cuya demanda va a seguir siendo creciente en los próximos años con cierta independencia de la evolución económica.
 
También anima a la creación de empresas dedicadas al reciclaje y a los arreglos de la ropa, los muebles y otros bienes que por su coste son difíciles de adquirir en momentos de crisis y se tratan de conservar.
 
Berggren ha lamentado que el Banco Mundial de la Mujer tuvo que cerrar su oficina en Marruecos en diciembre del año pasado por falta de fondos, pero continúan trabajando con mujeres andaluzas a pesar de no tener una oficina propia en la región.
 
Sin embargo, confiesa que no se conceden demasiados microcréditos a mujeres del medio rural, ya que el máximo permitido, 25 mil euros, no es suficiente para las empresas de turismo rural, una de las iniciativas femeninas más frecuentes. Sólo pequeñas empresas unipersonales, como tiendas de alimentación o de artesanía, se han beneficiado de sus ayudas.
 
Por otra parte, el Banco Mundial de la Mujer trata de potenciar el mercado femenino mediante las Casas de Comercio, lugares donde se ponen a la venta los productos de entre 35 a 40 mujeres distintas cada tres meses y cuyos beneficios van directamente a las productoras. En estos establecimientos se ofrece asimismo asesoría y formación a las emprendedoras con el fin de optimizar el producto en diseño y calidad y hacerlo más atractivo para el mercado.
 
 
Fotos: archivo AmecoPress
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Internacional - Economía - Mujeres Rurales - Empresarias; 15 octubre (10), AmecoPress
 

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