Mil asesinadas en España por violencia de género desde 2003
Madrid, 20 junio. 19. AmecoPress. - El número de mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas asciende a 1.000 desde 2003, año en que empezaron a elaborarse las estadísticas. Desde entonces, no hay ninguna provincia en España en la que no se hayan cometido al menos dos crímenes machistas. La presidenta del Observatorio, Ángeles Carmona ha condenado en una declaración institucional estos hechos, expresando su pésame a las familias y su repulsa ante una cifra que califica de amarga e inasumible en cualquier sociedad.
Ángeles afirma que “hemos avanzado mucho y no podemos dar un paso atrás, no vamos a bajar la guardia en ningún momento”. Ya que el número total de denuncias presentadas desde 2007, año en el que empezaron a realizarse registros específicos por los Juzgados especializados en violencia contra la mujer, asciende a 1.657.554. El mayor número de ellas, 166.961, se presentaron el año pasado, ejercicio en el que se consolidó la tendencia al alza que había comenzado cinco años antes, en 2013. Él número de sentencias condenatorias dictadas desde 2007 asciende a 373.333. Un total de 35.252 corresponden a 2018, año en el que se dictaron el mayor número de fallos con resultado de condena y que es el último de una tendencia al alza que comienza en 2013 y se mantiene de forma sostenida.
Según el estudio de las sentencias dictadas en los casos en los que hubo víctimas mortales, realizado por los expertos del Observatorio, casi la mitad de los crímenes machistas (el cuarenta y ocho por ciento) se cometen con arma blanca. La segunda causa de la muerte, empleada en un veinte por ciento de los casos, son los traumatismos. Esos crímenes, en un porcentaje próximo al 80 por ciento, han sido calificados como asesinatos, no como homicidios, hecho que pone de manifiesto la intencionalidad del agresor. Ante esto, Ángeles pide esperanza para las víctimas y las invita a romper el silencio, expresando que “es posible romper con las cadenas de la violencia” ya que “lo hacen cada año más del 70% de las mujeres que lo padecen”.
De los estudios realizados por los expertos también se desprende que el autor del crimen se entrega voluntariamente en el cuarenta y uno por ciento de los casos, una circunstancia que ha llevado a incluir en el Pacto de Estado Contra la Violencia de Género de 2017, a propuesta del Observatorio, que no se aplique la atenuante de confesión para evitar que los victimarios se beneficien de este hecho. La presidenta insiste en “recordar a todas las entidades sociales e instituciones públicas la necesidad de perseverar en las líneas de trabajo marcadas por el Pacto de Estado de 2017”
Durante todos estos años, la jurisprudencia también ha experimentado una significativa evolución. El Tribunal Supremo ha establecido, que la agravante de género debe aplicarse en todos los casos en los que la mujer es víctima por el mero hecho de ser mujer, y no sólo en aquellos en los que el hecho violento se produce en el ámbito de la pareja. También ha apreciado la existencia de la “alevosía de género”, derivada de la imprevisibilidad de un ataque protagonizado por una persona con la que la víctima convive; y ha excluido los celos como justificación válida del arrebato u obcecación.
El alto Tribunal ha determinado también que el retraso en denunciar no debe interpretarse negativamente para la víctima, pues su silencio se debe en gran medida al miedo, al temor a una agresión mayor o incluso a ser asesinada. El pánico de la víctima no puede suponer, afirma el Supremo, una “traba de su credibilidad”. Además, la presidenta del Observatorio insiste en que por eso “es vital que la víctima o su entorno denuncien” ya que “sólo así podrán adoptarse medidas de protección y frenar la violencia” y “sólo así evitaremos la impunidad en estos atentados contra los derechos humanos”
Foto: Archivo AmecoPress, cedida por el Observatorio contra la violencia doméstica y de género.
Estado Español – Violencia de género – Feminicidio
20, junio. 19. AmecoPress.