Dominicana: Reacción por muertes masivas de recién nacidos
Santo Domingo, 09 may. 18. AmecoPress/SEMlac.- Autoridades de Salud intervinieron este primero de mayo al Hospital Regional Jaime Mota, ubicado en la sureña provincia de Barahona, donde murieron siete recién nacidos durante los días 23 al 27 de abril.
Según detalles preliminares obtenidos por SEMlac, la comisión del Ministerio de Salud y del Servicio Nacional de dicho Ministerio notificó que "la ruptura prematura de membranas, la prematuridad y el bajo peso fueron las condicionantes que produjeron el fallecimiento de cinco de los siete casos" reportados.
También puntualizaron la baja aplicación de los protocolos neonatales oficializados por el Ministerio de Salud, las debilidades en el laboratorio clínico y departamento de imágenes, así como un incompleto equipamiento en las áreas de atención neonatal.
A ello se añade que el hospital no cuenta con médicos especialistas durante las 24 horas y tampoco "se utilizan en los expedientes clínicos las herramientas básicas de atención materna neonatal, tales como historia clínica perinatal o toma constante de signos vitales".
El incumplimiento de las normas de bioseguridad en las áreas de preparto, parto, recepción de recién nacidos, cirugía y unidad de cuidados intensivos forma parte de esta crítica situación.
Tras la intervención inmediata del Hospital Jaime Mota por parte del Servicio Nacional de Salud (SNS), se determinó designar médicos especialistas del área; capacitar el personal (reanimación avanzada, bioseguridad y protocolos de atención, entre otros) y priorizar la reconstrucción de la infraestructura en las áreas de atención materna neonatal.
Igualmente se dispuso completar el equipamiento del laboratorio y de las áreas neonatales y asumir acciones generales e inmediatas para el cumplimiento de la atención materna neonatal (partos, historia clínica perinatal y hoja de signos vitales).
Los funcionarios llamaron a "un mayor compromiso de los recursos humanos, a fin de que las medidas adoptadas impacten favorablemente en la reducción de la mortalidad materna y neonatal".
Opiniones dudosas
El pasado 27 de abril, el periódico El Caribe, en su versión digital, publicó las palabras del director del Centro Regional de Salud, doctor Cornelio Ramírez, quien indicaba que eran tres los fallecidos, los cuales, decía, traían una infección provocada por una bacteria adquirida en otro sitio.
Sin embargo, en esa misma fecha, el personal que labora en la morgue del referido centro asistencial habló de la defunción de seis niños.
Pese a que en estos días las notas publicadas por los medios de prensa han sido imprecisas y desiguales, e inexactos los reportes estadísticos, El Caribe recordó que hace unos seis meses, un total de ocho niños recién nacidos fallecieron en el Jaime Mota, sin que las autoridades sanitarias ofrecieran informe alguno sobre la penosa situación.
Organizaciones "aturdidas"
Listín Diario dio a conocer este primero de mayo las declaraciones de las 35 organizaciones que integran la Alianza por el Derecho a la Salud (ADESA), que plantearon sentirse "aturdidas por la información de muertes masivas de recién nacidos en el Hospital Regional de Barahona y en otros centros asistenciales del país".
Agregaron que al menos 54 niños menores de 28 días de nacidos han muerto en el Jaime Mota en lo que va de año, lo que equivale a un marcado incremento en relación con el primer cuatrimestre del año 2017, cuando fallecieron 16.
"Se trata de un hecho muy grave e intolerable, que refleja el fracaso de la política sanitaria del Gobierno y que reclama acciones contundentes para evitar su repetición", expuso ADESA.
Denuncian, además, que el hospital recibe un subsidio mensual de 2,8 millones de pesos (56, 680.16 dólares); pero una parte de ese dinero se invierte en pagar nóminas de botellas políticas; sin olvidar que el proceso de reconstrucción se ha aletargado durante años, cuestión que contraviene la atención a miles de pacientes que día a día procuran sus servicios.
El mal trasciende…
La Alianza denuncia que "las muertes neonatales no se limitan a Barahona. En los primeros cuatro meses de este año en el país han muerto cerca de 1.000 niños antes de cumplir los 28 días de nacidos, sin incluir los abortos y otros casos antes de nacer.
"Este incremento alarmante de la mortalidad neonatal en lo que va de año es una evidencia irrefutable de la profunda crisis del sistema de salud de la República Dominicana", subrayan y precisan que "las propias autoridades y los organismos internacionales, como Organización Panamericana de Salud (OPS), y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), han reconocido que cerca del 83 por ciento de la mortalidad neonatal se puede evitar con solo garantizar servicios sanitarios de calidad en el primer y segundo nivel de atención en salud".
República Dominicana ocupa el segundo lugar en la región con las peores tasas de mortalidad neonatal de América Latina, solo precedido por Haití y, mundialmente, se ubica en el lugar número 50 entre 184 países.
En 2017, cerca de 3.000 recién nacidos murieron, para un triste aumento del 12 por ciento en relación con el 2016, según apuntan los boletines epidemiológicos del Ministerio de Salud Pública, y amplían que, en los últimos 20 años, el fenómeno se ha multiplicado. Los embarazos adolescentes son, en gran medida, causa principal de estas pérdidas, que superan el 22 por ciento.
Aunque consideran causas las infecciones, el déficit de personal médico y de enfermeras en las salas de cuidados intensivos; la falta de programas para el traslado neonatal y las deficiencias en el chequeo de embarazadas, los integrantes de la Alianza manifiestan que "el sistema de salud no les garantiza las atenciones adecuadas, razón por la que muchos de ellos terminan en la muerte de la criatura, la madre o de ambos".
Finalmente, entienden que "la reducción al mínimo de las muertes neonatales debe ser el principal reto de las autoridades en materia de salud. Asumirlo implica elevar las inversiones destinadas al tema, eliminar el déficit de unidades neonatales en los hospitales con estándares de insumos básicos; acabar con el desorden gerencial y administrativo en el sector salud; promover el trabajo en equipo entre autoridades, médicos, enfermeras y organizaciones de la sociedad civil y extirpar la corrupción y la politiquería en la política sanitaria.
"Llamamos al presidente de la República, Danilo Medina, a cambiar su enfoque en la política de salud para priorizar las inversiones en las personas, en vez de edificaciones y pintura. Es necesario dignificar los hospitales maternos e infantiles, dotándolos de mayor personal, equipamiento e insumos y finalizando la reconstrucción que afecta a muchos de ellos", concluyen.
Foto: Archivo AmecoPress.
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Internacional – Infancia – Salud – Salud reproductiva. 09 may. 18. AmecoPress.