Aumenta el número de denuncias y de condenas por malos tratos
Según los datos presentados por la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, Inmaculada Moltalbán, en el balance judicial de la aplicación de la ley integral, las denuncias presentadas por mujeres que sufren maltrato por parte de sus maridos o ex parejas siguen aumentando. Desde la entrada en vigor de la ley de violencia de género en junio de 2005, se han registrado 480.00 denuncias. En el primer semestre de este año ha habido 71.022, lo que supone un ascenso del 14 por ciento con respecto al año anterior. También ha crecido el número de condenas, que en los tres años de aplicación de la Ley Integral suman 80.000, lo que supone una media de 71 diarias. El observatorio también ha constatado el incremento de mujeres extranjeras afectadas por este tipo de violencia.
La interpretación que se ha hace de los datos arrojados por el Observatorio contra la Violencia Doméstico y de Género, por parte de especialistas, es que la aplicación de la ley integral ha permitido una respuesta judicial más eficaz y rápida y una mejor coordinación institucional y que ha generado confianza en las víctimas, que cada vez denuncian más estas situaciones. Sin embargo, se hace necesario perfeccionar los mecanismos de protección de las víctimas y el aspecto de la prevención.
Consuelo Abril, presidenta de la Comisión para la Investigación de Malos Tratos a Mujeres de España, coincide en valorar que la “existencia de juzgados especializados y fiscalías está permitiendo dar una respuesta más ágil,” sin embargo, asegura que “necesitamos jueces que tengan formación en género, conocedores del tema del maltrato y no dejar en manos inexpertas la resolución de este problema”
Las mujeres extranjeras están doblemente desfavorecidas
Con respecto a las mujeres inmigrantes, las cifras arrojadas en el balance que ha ofrecido el observatorio indican que la violencia doméstica en ese sector de la población ha aumentado considerablemente. La abogada Consuelo Abril, en una conversación mantenida con Amecopress, afirma que “es necesario trabajar para que las inmigrantes estén informadas, que sepan que pueden denuncias sin mermar sus derechos, que cuentan con protección legal. Son mujeres doblemente desfavorecidas, cuando vienen se encuentran sin apoyo familiar, sin arraigo y muy desprotegidas.”
En ese sentido el observatorio ha constatado el incremento paulatino de mujeres extranjeras que solicitan órdenes de protección, que ha pasado de un 30 por ciento en el tercer trimestre de 2005, al 36,9 por ciento en el segundo trimestre de 2008, por lo que recomienda actuaciones preventivas para estas víctimas "doblemente desfavorecidas".
Mecanismos de protección personalizados
Según Abril la eficacia de la ley “no se puede valorar solo por el número de mujeres asesinadas por sus parejas, porque siete de cada diez de las mujeres muertas no habían denunciado,” pero es importante “enfatizar en la necesidad de garantizar mecanismos de protección a las víctimas y también aumentar muchísimo la labor de prevención. Si no, no será posible implicar a la sociedad entera en la erradicación de la violencia.”
Para esta especialista, “cada mujer víctima de malos tratos tendría que ser evaluada por una unidad de riesgo que debe ser la encargada de establecer las medidas necesarias, lo que realmente necesita esa mujer, aunque ella misma a veces ni lo sepa ni lo solicite, lo cual es normal y habitual, porque la mujer en este caso, está incapacitada para ver qué tipo de medidas necesita.”
Con la prevención se salvan vidas
Con respecto a la prevención, para Consuelo Abril “existe un gran déficit. En el Informe de Impacto de Género, por ejemplo, podemos ver que el presupuesto destinado a las campañas de prevención es diez veces menor que el dedicado a la prevención de los accidentes de tráfico. Los cinco millones de presupuesto del año pasado no son suficientes, es una miseria. Entonces, lo que pedimos es que este tipo de violencia sea tenga el mismo nivel de prioridad que otras cuestiones de Estado, como por ejemplo el tráfico. En este caso, vemos que a medida que se invierte en prevención y se toman medidas, el número de accidentes y de víctimas disminuye. ”
“Con la prevención”, continúa Consuelo Abril, “se salvan vidas y, además, lo que no se invierte en prevención, se paga en otros campos. No sólo hablo de campañas publicitarias, sino también de incluir testimonios de las víctimas y de especialistas en diversos programas y especialmente en los colegios. Necesitamos transmitir a la gente joven para que repudien la violencia.”
Según Abril, habría que hacer campañas publicitarias destinadas a los agresores, no sólo a la víctima, como ocurre hasta ahora y destinar más recursos a medidas de sensibilización, educación, publicidad, sanidad y tutela con el objetivo de acabar con el aumento de números de feminicidios que se produce cada año.
Estado español – Violencia de género; 04 noviembre (08) AmecoPress